Hay palabras que cuando las dices, se te llena la boca diciéndolas (¿todo el mundo entiende esta expresión, no? quien no la entienda, que lo ponga en un comentario y yo lo explico).
La primera palabra es exitante (que no excitante). Sí, lo sé, exitante está mal escrita, tendría que ser excitante, pero tiene su historia que voy a contar ahora mismo. El otro día estaba con Melanie revisando un trabajo desde mi portátil porque el suyo no tiene corrector ortográfico y tenía que entregarlo. A medida que salían palabras mal escritas, yo se la situaba y la decía mal, para que supiera qué palabra era la incorrecta. Llegamos a esta palabra, y nos pusimos a cachondearnos de los fallos que había cometido. Nos gustaba cómo sonaba y además sonaba a la forma de pronunciar de uno de nuestros profesores (uno de los que personalmente más me gustan de la carrera). Así que nada, quien quiera saber cómo habla nuestro profesor, que pronuncie la palabra exitante.
La siguiente palabra es corchoneta, (colchón de corcho, jeje). Esta palabra tiene la misma historia que la anterior (la corrección del trabajo de Melanie). Yo de todas formas, colchoneta la pronuncio igual que la correcta (corshoneta), qué le voy a hacer, a mí me gusta el acento chiclanero (o shiclanero, como yo diría).
En fin, esto es todo por hoy. Para otra ocasión, habrá más palabras fonéticamente bonitas. Sí, esto es un cutre-post.
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