Feria de las ciencias

Quería escribir este post ayer, pero llegué tan cansada de explicar, que no tuve fuerzas.

Me llevé desde las 4 de la tarde hasta las 19'30 explicando sin parar el dilema de Heinz. Si alguien quiere saber qué es lo que es, pues que ponga en google Köhlberg o dilema de Heinz, que seguro que le tiene que salir.

Al principio estuvo bien. De hecho empecé disfrutando más que los propios niños y padres juntos.
Fui a ver más stands mientras que me tocaba mi turno con muchísima ilusión de que me fueran explicando cosas. Me explicaron cuánto pesaría en la luna, cómo se parecen los embriones de un pollo, y un conejo en sus primeras fases. Pero mi desilusión vino cuando llegué a un stand y me quedé mirando a las chicas a ver si me explicaban su experimento. Lo único que pude sacar de ellas fue "los imanes se repelen"y dicho de muy mala manera... Así que cogí y me fui a mi propio stand. No pensaba aguantar a gente que estaba allí obligada.

Nada, directa al stand de psicología. Y de paso al de la facultad de física, con ese chico tan mono explicándome cómo se propagaban las ondas del sonido.

En fin, nuestro stand tenía un guiñol para enseñar a niños y mayores la evolución del razonamiento, otra actvidad consistía en reconocer las emociones de los animales (si se parecían las de los animales a las humanas), otra de desarrollo cognitivo, un conector para identificar etapas evolutivas con cosas que se pueden hacer en ciertas edades, y un par de actividades de psicología cultural y sobre pensamiento.

Me lo pasé muy bien, pero llegó un momento en el que no pude hablar más y miré con mucha cara de pena a mi compañera, que vino a salvarme, jejeje

De todas formas, repetiría experiencia.